Balmaseda, la villa más antigua de Bizkaia, invita a ser descubierta por aquellos que buscan la perfecta combinación de historia, cultura y naturaleza. Este enclave único ofrece rincones llenos de encanto y una gastronomía que deleita a cualquier paladar. A tan solo unos kilómetros de Bilbao, Balmaseda es un destino turístico imprescindible en Vizcaya.
Qué es Balmaseda y por qué es importante
La importancia de Balmaseda se remonta a su fundación en el año 1199, destacándose como una villa con un papel comercial crucial en la Edad Media. Su legado histórico se percibe en cada paso que se da por sus calles peatonales y rincones únicos. El Puente Viejo, un símbolo de su pasado comercial, es uno de los muchos testimonios que esta villa guarda con orgullo.
Adentrarse en Balmaseda es como viajar en el tiempo, descubriendo la herencia de un lugar clave en la historia del País Vasco. Su casco histórico, declarado Bien de Interés Cultural, es muestra palpable de la relevancia que Balmaseda ha tenido a lo largo de los siglos.
Su cercanía a Bilbao, la capital de Vizcaya, hace de Balmaseda un destino accesible para escapadas culturales y gastronómicas. Esta villa es perfecta para quienes desean vivir una experiencia auténtica, llena de tradición y encanto.
Qué monumentos históricos debes visitar en Balmaseda
La riqueza monumental de Balmaseda es vasta. Uno de los rincones únicos que ver en la joya de Vizcaya es, sin duda, la Iglesia de San Severino. Esta iglesia, de estilo gótico, es un punto de referencia para entender la espiritualidad y la arquitectura de la región.
El Palacio Horcasitas, con su aire señorial, es otro de los edificios emblemáticos que no puedes dejar de visitar. Representa la importancia económica y social que Balmaseda tuvo en el pasado.
No podemos olvidar el Museo de Boinas La Encartada, donde se destaca la tradición industrial de la villa y se honra la memoria de uno de los productos más representativos del País Vasco: la boina.
En tu itinerario tampoco debería faltar una visita al Puente Viejo, que no solo es un icono de la localidad, sino también testigo de siglos de historia.
Y, por supuesto, el Casco histórico en sí mismo es un monumento vivo, donde cada rincón cuenta una historia y cada edificio tiene algo que narrar.
Cómo es la gastronomía local en Balmaseda
La gastronomía típica de Balmaseda es un espejo de la cultura vasca y ofrece platos que se han transmitido de generación en generación. Sabores intensos y productos de la tierra definen su cocina.
Uno de los platos estrella es la alubiada, un guiso de alubias que se convierte en el protagonista en los meses más fríos. No podemos dejar de mencionar las putxeras, un plato tradicional vinculado a la historia ferroviaria de Balmaseda, que se prepara en una olla de hierro.
Los postres también tienen su lugar destacado, con delicias como las carolinas y los canutillos de Bilbao, que aunque no son originarios de Balmaseda, se han adoptado con fervor en la gastronomía local.
Por supuesto, un recorrido gastronómico no estaría completo sin la degustación de los vinos de la región y el txakoli, que acompañan a la perfección cualquier comida.
Qué actividades puedes realizar en Balmaseda con niños
Para quienes viajan en familia, Balmaseda se presenta como un destino lleno de aventuras para los más pequeños. Desde visitas a museos interactivos hasta rutas de senderismo adaptadas para niños, la villa tiene opciones para todos.

El Museo de Boinas La Encartada, por ejemplo, además de mostrar la historia de la producción textil, suele organizar talleres y actividades educativas que fascinarán a los niños.
Las áreas naturales circundantes también ofrecen rutas fáciles, ideales para pasar un día en contacto con el aire libre y disfrutar de la naturaleza.
Y no hay que olvidar las fiestas locales, que a menudo incluyen actividades específicas para el disfrute de los más jóvenes, como talleres de manualidades, juegos y teatro en la calle.
Cuáles son las tradiciones y festejos más destacados en Balmaseda
Las tradiciones y festividades en Balmaseda son un reflejo de la identidad cultural de la villa. Una de las más famosas es la representación viviente de la Pasión de Cristo durante la Semana Santa, un evento que atrae a visitantes de todas partes.
Otra festividad destacada es el concurso de putxeras, que se celebra en octubre y rinde homenaje a la gastronomía vinculada al legado ferroviario de la localidad.
La festividad de San Severino, patrono de la villa, es otro momento del año en el que Balmaseda se viste de fiesta, con música, danzas y celebraciones que llenan las calles de alegría y tradición.
Estas festividades no solo son ocasiones para la diversión, sino también momentos en los que la comunidad se une y muestra el orgullo por su herencia cultural.
Dónde se encuentra Balmaseda y cómo llegar
Situada a escasos 30 kilómetros de Bilbao, llegar a Balmaseda es sencillo tanto en coche como en transporte público. La red de carreteras y la proximidad a la capital de Vizcaya facilitan el acceso a este encantador rincón del País Vasco.
Para quienes prefieren el transporte público, hay servicios regulares de autobús y tren que conectan Balmaseda con las principales localidades cercanas, ofreciendo una alternativa ecológica y cómoda para visitar la villa.
Así mismo, esta proximidad convierte a Balmaseda en un destino ideal para una escapada de día desde Bilbao, permitiendo a los visitantes sumergirse en la historia y la cultura sin necesidad de largos desplazamientos.
Preguntas relacionadas sobre Balmaseda
¿Qué ver en Balmaseda con niños?
Además del mencionado Museo de Boinas La Encartada, Balmaseda cuenta con espacios como el Parque de la Boina, que es perfecto para un picnic familiar o para que los niños jueguen al aire libre. Las visitas guiadas por el casco histórico también pueden ser una forma educativa y divertida de aprender sobre la historia del lugar.
En fechas específicas, como durante las festividades locales, se organizan actividades pensadas para el público infantil, como juegos tradicionales y espectáculos de marionetas, que aseguran una experiencia inolvidable para los más pequeños.
¿Dónde comer en Balmaseda?
Para degustar la gastronomía típica de Balmaseda, hay una variedad de restaurantes y tabernas que ofrecen desde platos típicos hasta opciones más contemporáneas. Algunos establecimientos incluso se han especializado en recrear recetas antiguas para brindar una experiencia gastronómica única.
Además, no faltan las pastelerías y panaderías donde se pueden adquirir dulces típicos de la región, perfectos para llevar como recuerdo o para disfrutar en el momento.

¿Cómo llegar a Balmaseda?
Desde Bilbao, se puede llegar a Balmaseda en coche tomando la carretera BI-636 o la autopista A-8, siguiendo las indicaciones hacia Balmaseda/Valmaseda. En tren, la línea de Feve realiza viajes frecuentes que conectan ambos destinos. En autobús, diversas líneas también unen Bilbao con Balmaseda, siendo una opción práctica y económica.
Una vez en la villa, su tamaño hace que sea fácil desplazarse a pie, permitiendo disfrutar al máximo de sus calles y rincones con encanto.
¿Qué hay hoy en Balmaseda?
Para estar al tanto de los eventos del día en Balmaseda, lo mejor es consultar el calendario de actividades municipales o visitar la oficina de turismo al llegar. La villa suele albergar eventos culturales, exposiciones y mercadillos que cambian según la temporada.
También es recomendable echar un vistazo a las redes sociales o sitios web locales, donde se anuncian las últimas novedades y eventos especiales que puedan estar teniendo lugar en tiempo real.
¿Qué ver en Balmaseda?
Además de los monumentos y museos mencionados anteriormente, es imprescindible pasear por sus calles empedradas y descubrir las pequeñas tiendas artesanales y cafés que brindan una cálida bienvenida. Los puentes que cruzan el río Cadagua también ofrecen vistas pintorescas de la villa.
Y para quienes disfrutan del arte sacro, la Iglesia de Santa Clara y la Capilla de San Roque son dos joyas que no deben pasarse por alto.
¿Qué ver en Orduña?
Aunque Orduña no se encuentra en Balmaseda, merece la pena visitarla si se está en la zona. Esta ciudad vasca es conocida por su impresionante Plaza de los Fueros, el Santuario de la Antigua y su interesante oferta de actividades al aire libre, como el senderismo por el Parque Natural de Sierra Salvada.
Orduña también destaca por su riqueza arquitectónica y su apacible ambiente, ideal para quienes buscan una experiencia más tranquila.
¿Qué ver en Balmaseda este fin de semana?
Para un fin de semana en Balmaseda, es aconsejable revisar la agenda cultural de la villa, que suele estar repleta de eventos, desde representaciones teatrales hasta conciertos o talleres artesanos. El mercado semanal es un lugar excelente para adquirir productos locales y conocer más de cerca a sus habitantes.
Además, el fin de semana es ideal para disfrutar de una comida o cena en los restaurantes mencionados anteriormente y sumergirse en la vida nocturna, que aunque tranquila, es acogedora y llena de carácter.
¿Qué ver en Artziniega?
Artziniega, al igual que Balmaseda, es un pueblo con mucho encanto. Su casco histórico, con edificios bien conservados, transporta al visitante a otra época. El Museo Etnográfico es una parada obligatoria para entender la vida y las costumbres de la zona. Además, la naturaleza circundante de Artziniega ofrece el escenario perfecto para rutas de senderismo y disfrutar del paisaje vasco.
La visita a estos lugares permitirá comprender mejor la idiosincrasia del País Vasco y sus pueblos llenos de historia.
Para finalizar, te invito a disfrutar de un vídeo que captura la belleza y el carácter de Balmaseda y sus alrededores, permitiéndote sumergirte aún más en la magia de este lugar:

En resumen, Balmaseda es un destino que sorprende por su riqueza histórica, cultural y natural, ofreciendo una experiencia inolvidable tanto para los visitantes de corta estancia como para aquellos que desean profundizar en los secretos que guarda esta joya de Vizcaya.
¡Qué maravilla de lugar es Balmaseda! Me encanta cómo combina historia, cultura y naturaleza de una manera tan auténtica. Definitivamente, tengo que probar la alubiada y las putxeras, suenan deliciosas. Además, la cercanía a Bilbao lo hace perfecto para una escapada rápida. Gracias por compartir tanta información interesante sobre esta joya de Vizcaya. ¡Ya estoy planeando mi visita!